El milagro de la palabra
$40,000Una mujer deseosa de aprender de revés, niña que mira el mundo a través de las hojas. Y ahí aparece una de las filosofías fundamentales de la obra, la de la niña interior que sale y sabe abrir la puerta para ir a jugar, como en el estribillo de la infancia. Una niña dolida, suspendida en una butaca y en su silencio, se encuentra a sí misma en las esencias de la alegría, aprendida en los aromas de la abuela y en el juego, bien serio, de vislumbrar el poema.
Esta hija, por ventura bienaventurada, también abuela, madre y hermana, viaja por los milenios de las mujeres ancestrales, como bella por su casa, también clara y milenaria. Así la vemos siempre, la viajera, la que canta y visiona cielos morados en sus paisajes pintados como espejismos de astros.